Nazanín Armanian es una escritora y politóloga iraní exiliada en España desde 1983.Desde que la conocí a partir de las páginas de publico.es he ido coleccionando todos sus artículos. No sabía que tenía su propia página web: http://www.nazanin.es/
La escuché, con su voz de niña, en el programa de Javier del Pino, A VIVIR, y también me impresionó. Aunque no se reivindica así, se intuyen sus simpatías por el Partido Comunista de Irán, que contó con el primer ministro de esa ideología fuera de la URSS, después de la Revolución Rusa,allá por los años 20 del siglo pasado. Sus análisis están impregnados de sentido de "clase". El libro, que comparte con Martha Zein, constituye toda una guía para orientarse en el "avispero" de Oriente Próximo, o laberinto, o jeroglífico.
Su primer objetivo ha consistido en desmentir que el eje del conflicto sea de raíz religiosa, aunque los grandes medios de comunicacion insistan en ese envoltorio. Los suníes constituyen alrededor del 90% de la población de credo islámico. El sunismo y el chiísmo parten de la misma matriz; tienen muchos más elementos en común que factores que les separen. Es por ese motivo que la primera parte del libro está dedicada a informar sobre los orígenes históricos. Tampoco es cierto que en Oriente Medio haya habido un afán antijudío. Con firmeza, las autoras subrayan que el discurso antijudío nunca tuvo lugar en Irán ni en el resto de Oriente Medio; que en la historia más reciente, durante el Holocausto, miles de judíos –entre ellos 871 niños polacos- fueron acogidos por Irán, al tiempo que sus embajadas en varios países europeos expedían pasaportes iraníes para los hebreos amenazados. Hubo también una Lista del Schindler iraní.
A continuación, Armanian-Zein nos plantean las coordenadas para analizar el conflicto. Lo sitúan al final de la Segunda Guerra Mundial, que dará como resultado el nacimiento del bloque socialista, que amplía la influencia de Moscú hasta el Este de Europa. Por otra parte, la creación de Israel y la ocupación de las tierras palestinas. Éste es otro de los acontecimientos que marcarán las pautas de la lucha chií-suní en el “mundo musulmán”.
En el año 2011 habrá una nueva reconfiguración del mapa del mundo: las llamadas Primaveras árabes, unas auténticas, otras falsas, servirán para destruir grandes Estados árabe-suníes como Libia y Siria
IRAN (RII) VERSUS ARABIA SAUDÍ (RSA)
A pesar de que el principal país en población suní es Indonesia, ha sido Arabia Saudí el Estado que ha levantado la bandera de la defensa de las “tradiciones” islámicas y que se ha presentado como el digno rival del chiismo iraní; que Arabia Saudí e Irán compartan la misma región para expandir su poder e influencia, ha sido el factor determinante en lo que se presenta como un pulso entre el sunismo y el chiismo, y eso sucede sólo una vez que en Teherán se instala una república islámica chií y no antes.
El golpe de Estado de 1925 realizado por el fundador de la última dinastía monárquica de Irán, Reza Pahlevi (Reza Shah), coincide con la formación del Reino de Arabia Saudí (RAS). A pesar del paralelismo, hay grandes diferencias y una es abismal: la dictadura de Reza Pahlevi es modernizadora. Las reformas que emprende tienen un sello claro anticlerical, nacionalista y favorable a la restauración de aquel Imperio persa derrocado por los árabes.En la otra orilla del golfo Pérsico, en el Reino de Arabia Saudí (RAS), el proceso político es otro. Este país nace de la desintegración del Imperio Otomano y del dominio colonial de Gran Bretaña en 1932
La monarquía de Al Saud y los líderes de la secta que lleva el nombre de su fundador, Muhamad Ibn al Wahab (1703-1792), utilizarán la versión más rigurosa y fundamentalista del islam para gobernar un país que poco después, en 1938, descubrirá el oro negro debajo de sus arenas. La férrea dictadura absolutista gobernante desde entonces ha impedido los cambios modernizadores necesarios para que el país se adapte a los nuevos tiempos, de ahí que no tenga Parlamento ni constitución ni elecciones, y ni siquiera reconozca las libertades de prensa y de asociación
CIERTAS DISPUTAS DIBUJAN GEOGRAFÍAS ANTICOMUNISTAS
Los intereses compartidos con EEUU fueron los motivos para que, en 1971, se pusiera en marcha la doctrina de twin pillars (“doble pilar”), promovida por el presidente Richard Nixon. Esta doctrina dará lugar a una alianza anticomunista en el golfo Pérsico que asignará a Irán y Arabia Saudí el papel de garantes de sus respectivos intereses en la zona en nombre de la “seguridad nacional”, aunque el gendarme sea el sah y los saudíes desempeñen un rol secundario
Un motivo principal de preocupación para los saudíes era que, por primera vez en su historia, tenían un competidor para liderar a la umma (“la comunidad musulmana”) en su totalidad y a nivel mundial, ya que los ayatolás iraníes presentaban su invento como una república “islámica”, que no “chií”, y habían lanzado una ofensiva propagandística contra la casa de Saud, tachándoles de “asociacionistas”, ”peones de Israel y de EEUU”, etc…
Y había más: la carga “social” de la Revolución iraní sumada al discurso del ayatolá Jomeini, quien en los primeros años de su mandato prometía a los desheredados del mundo el fin de los regímenes taguts, término coránico para referirse a los individuos perversos, rebeldes ante Alá. Jomeini identificará este apelativo con las oligarquías opresoras, señalando directamente a la casa de Saud como una de las peores, por haberse camuflado bajo el manto del islam.
Uno de los triunfos del “islam chií” frente al ”islam suní” radicaba en el hecho de que los nuevos líderes de Irán se apoderaron de las consignas sobre la justicia social y sobre un reparto equitativo de los inmensos recurso naturales del país a favor de las grandes masas de pobres, lanzadas por los grupos de izquierda durante los diez meses que duró la Revolución de 1978. Por fin, las sociedades subdesarrolladas musulmanas, tras los fracasos de los nacionalismos y de la caída del socialismo encuentran una ventana a la esperanza en esa alternativa que representa la RII cuando ven que, en Irán existen elecciones, las mujeres pueden estudiar en las universidades, hay un buen cine, etc…
PALESTINA: AQUÍ EMPIEZA LA GUERRA SUNÍ-CHIÍ
Aunque la gran mayoría de los palestinos son suníes, el número de chiíes ha ido creciendo desde la Revolución iraní de 1979, más bien por el activismo político que por convicciones religiosas; de hecho, la composición religiosa del pueblo palestino está marcada hoy por su lugar de residencia.
Fuera de la República Islámica de Irán (RII), la lucha por la liberación del pueblo palestino es un terreno en el que aparece el conflicto chií-suní en todo su esplendor.
La RII pasará de considerar la lucha palestina como una cuestión religioso-ideológica a considerarla un problema que afecta a su propia seguridad nacional, sin que por ello deje de agitar la bandera de solidaridad con Palestina.
La RII pasará de considerar la lucha palestina como una cuestión religioso-ideológica a considerarla un problema que afecta a su propia seguridad nacional, sin que por ello deje de agitar la bandera de solidaridad con Palestina.
El distanciamiento de la RII de Palestina se convertirá en una profunda brecha cuando, en 1988, la OLP renuncie a la lucha armada, reconozca el derecho del Estado de Israel a existir e inicie un diálogo de paz mediado por EEUU
HAMAS-FRANKENSTEIN
No son pocas las voces que ubican el nacimiento de Hamás en los sótanos oscuros del Mosad. Hamás, una organización de derechas religiosa, con grandes sombras y poca luz en sus acciones sociales y político-militares
El objetivo de esta construcción era debilitar a Fatah y ala izquierda palestina, dividir el movimiento de liberación de este pueblo y reducir la lucha anticolonial contra Israel a un conflicto interreligioso.
No son pocas las voces que ubican el nacimiento de Hamás en los sótanos oscuros del Mosad. Hamás, una organización de derechas religiosa, con grandes sombras y poca luz en sus acciones sociales y político-militares
El objetivo de esta construcción era debilitar a Fatah y ala izquierda palestina, dividir el movimiento de liberación de este pueblo y reducir la lucha anticolonial contra Israel a un conflicto interreligioso.
A Israel siempre le ha interesado que la lucha árabe centre su mirada en otro país “musulmán” en vez de apuntar al ocupante de las tierras palestinas; así han nacido diversos grupos religioso-políticos islámicos de origen oscuro en Yemen, Líbano. Siria, Libia…
IRAQ
Asolar Iraq lograría el efecto devastador deseado por Israel sobre la causa palestina. Yaser Arafat tenía la esperanza de que Husein se convirtiera en el contrapeso de Israel en la región, por lo que defendió a Iraq durante la invasión liderada por Washington.
Las petromonarquías del golfo Pérsico cortaron las ayudas económicas, dejando a la OLP aislada y pobre, y expulsaron a miles de trabajadores palestinos fuera de sus fronteras. Las organizaciones islamistas apoyadas por los regímenes teocráticos chiíes y suníes veían el camino despejado.
Avanza así la construcción de un nuevo Oriente Medio diseñado por el imperialismo estadounidense e Israel, edificado sobre los cuerpos calcinados de cientos de miles de personas, en el que un “Gran Israel” nacería si consigue hacerse con los territorios, el petróleo y el agua que pertenecen a sus vecinos.
EL ORO NEGRO PALESTINO
En 1999, año en el que la Franja de Gaza estaba bajo el control de la OLP dirigida por Yaser Arafat, se descubre que el suelo palestino guarda considerables bolsas de gas natural. Evidentemente, Israel las quiere. Poner fin a la inseguridad energética se había convertido para Israel en un asunto de seguridad nacional desde 1979.A partir de entonces Israel diseñó un ambicioso plan para diversificar la procedencia de sus importaciones, al tiempo que se puso a explorar los territorios bajo su control en busca de gas y petróleo.
Israel, además de consumidor de gas y petróleo, se ha convertido en un intermediario que transfiere esta mercancía a los países asiáticos, como ejemplo a Japón, que a consecuencia de las sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU a Irán, había bajado drásticamente su importación tradicional del petróleo de este país.
Israel está más interesado en la tierra, el agua y el petróleo de los vecinos que en la paz, y avanzará en sus planes de crear el “Gran Israel”, ahora que la “cuestión palestina” no es prioridad para la ONU o para alguna potencia, y eso a pesar de que sus aliados temen las “imprudencias” de los mandatarios hebreos.
El proceso de paz está muerto y ya no sirven los mecanismos tradicionales de ejercer una presión tangible sobre Israel para que cumpla con la legalidad internacional.
AMPLIAR LA POTENCIA DE VOZ PARA ORIENTE MEDIO (1)
NAZANÍN ARMANIAN: ORIENTE PRÓXIMO Y LA "UTILIDAD" DE ESTA GUERRA SEMIMUNDIAL (II)
Cap comentari :
Publica un comentari a l'entrada